María, siempre presente en nuestra historia comunitaria, un pequeño destello de su admirable luz.
María, un corazón afinado
al corazón de Dios.
Maria es el espejo más puro donde podemos ver reflejado el Amor de Dios. Con este escrito buscamos aprender de ella, meditar como latió su corazón al ritmo del corazón de Dios y como con sus actos, silencio y palabras marco un camino de discipulado, una escuela de vida, un modelo de seguimiento y aceptación de Cristo.